El cáncer de pulmón es el más frecuente del mundo, con aproximadamente 1.400.000 nuevos casos al año
Representa el 16,6% de todos los tumores entre los hombres (965.000) y el 7,6% entre las mujeres (387.000 casos). Las mayores incidencias se observan en Europa (sobre todo en el Este y en el Sur) y en Norteamérica.
Pero.. ¿qué le pasa a tus pulmones tras fumar 30 cajetillas?
Al final una imagen vale más que mil palabras, échale un vistazo a este experimento. (Haz clic aquí, si no puedes ver el vídeo)
¿Quiénes lo padecen más, hombres o mujeres?
La relación entre sexos es de 2,5 hombres por cada mujer en el mundo, 3,6 en Europa, y 9 en España. Es decir, por cada 9 pacientes con cáncer de pulmón del sexo masculino, hay una del sexo femenino. Esto es un reflejo de la baja incidencia del cáncer de pulmón entre las mujeres de nuestro país, probablemente porque se incorporaron más tarde al hábito de fumar.
En España se diagnostican unos 20.000 casos anuales, lo que representa el 18,4% de los tumores entre los hombres (18.000 casos) y el 3,2% entre las mujeres (2.000 casos).
¿Se puede prevenir?
Entre los diferentes factores de riesgo, uno de los más potente, es fumar y más hacerlo durante muchos años. Entre el 80-90% de los cánceres de pulmón se dan en fumadores, o en personas que hayan dejado de fumar recientemente. Los fumadores tienen un riesgo de 10 a 20 veces mayor de desarrollar cáncer de pulmón (según el número de cigarrillos fumados al día) que los no fumadores.
La utilización de tabaco light no varía el riesgo de padecer la enfermedad.
Los fumadores pasivos también tienen aumentado el riesgo de desarrollar cáncer pulmonar. En términos generales, es similar al de los fumadores de uno a dos cigarrillos al día.
Dejar de fumar disminuye el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, de manera que al cabo de 15 años se aproxima al de los no fumadores. Este descenso depende sobre todo del tiempo de consumo.
Esto es lo que le pasa a unos pulmones sanos con tan solo 60 cigarrillos:
En fases precoces de la enfermedad, el cáncer de pulmón no produce ningún tipo de síntomas o son muy inespecíficos. El diagnóstico en esta fase es generalmente accidental, es decir, se diagnostica por pruebas que se realizan para descubrir otros problemas de salud.
En la mayor parte de las ocasiones, el cáncer de pulmón se diagnostica cuando los síntomas obligan al paciente a acudir al médico. Debido al hecho de que los síntomas son tardíos, con frecuencia el cáncer de pulmón se diagnostica en etapas avanzadas.
Los síntomas dependen de la localización y extensión del tumor. Los más frecuentes son:
- Tos: es el síntoma más frecuente. Se produce por irritación bronquial. Con frecuencia se acompaña de expectoración. Es característico de los tumores que se localizan en la zona central de los pulmones. En aquellos pacientes, generalmente fumadores que ya presentaban tos como consecuencia de problemas respiratorios, lo que se produce es un aumento o exacerbación de este síntoma.
Hemoptisis o expectoración sanguinolenta: es un síntoma muy llamativo para el paciente y en muchas ocasiones el que le lleva a acudir al médico. - Disnea: el paciente comienza a notar sensación de falta de aire, que le impide cada vez más realizar cualquier esfuerzo como subir escaleras. Es más frecuente en los tumores localizados en la zona central de los pulmones.
- Dolor torácico: el dolor se produce cuando el tumor afecta a la pared torácica o la pleura. Suele ser característico de los tumores situados en la zona mas periférica de los pulmones.
Otros síntomas:
- Disfonía: en ocasiones el paciente nota cambios en la voz. Este síntoma se produce cuando el tumor se extiende al mediastino, y afecta al nervio recurrente que es el que mueve las cuerdas vocales.
- Disfagia: el paciente tiene la sensación de que la comida se le queda detenida en la mitad del tórax. Se produce cuando el tumor o los ganglios afectados comprimen el esófago.
- Síndrome de Horner: se produce cuando el tumor afecta a estructuras nerviosas en la parte más alta del tórax. Se caracteriza por la caída del párpado (ptosis palpebral), pupila contraida (miosis) y falta de sudoración en la mitad de la cara correspondiente al pulmón donde se localiza el tumor.En los casos de enfermedad avanzada el paciente presenta síntomas como: pérdida de apetito, decaimiento general, dolores de huesos, cansancio, debilidad, confusión, mareos o pérdida de peso.Cualquier otro síntoma puede aparecer como consecuencia de la existencia de metástasis en otros órganos. Por ejemplo: dolor de cabeza si existen metástasis cerebrales o dolor lumbar por afectación de la columna vertebral.Es importante que sepas que estos síntomas también pueden aparecer asociados a otras enfermedades distintas al cáncer. Sin embargo, ante la aparición de cualquiera de ellos, es fundamental que acudas a tu médico para que se realice el diagnóstico y tratamiento oportuno.Antes de asumir que tienes una enfermedad grave, espera a conocer el resultado de las pruebas.Fuente y más información, en la AECC sobre el cáncer de Pulmón.
Pero tranquilidad. que actualmente existen muchos programas muy eficaces para dejar de fumar, consulta con un psicólogo especializado y di adiós al tabaco definitivamente.
Ariadna González.
Psicóloga Sanitaria y Psicooncóloga.
Cuéntame, estaré encantada de poderte apoyar